Mucho hemos hablado sobre la Windows 10 October 2018 Update y su larga lista de problemas, problemas como que el sistema estaba borrando archivos de algunos usuarios y por lo que Microsoft decidió pausar el lanzamiento y detener la actualización.
El problema se solucionó, al menos para los Insiders, y de ese lado de las cosas parece que Microsoft tiene intenciones de mejorar la forma en la que prueba las versiones preliminares de Windows 10. Para ello han decidido aumentar la cantidad de actualizaciones de calidad que reciben aquellos Insiders que estén en el anillo lento, y eso es una buena noticia.
Los anillos del programa Insider
Para los menos entendidos, el Programa Insider al que se puede unir cualquier usuario para probar versiones preliminares de Windows 10, tiene tres anillos. El rápido, el lento, y la vista previa de lanzamiento. En el primero se reciben más actualizaciones y más rápido, y por consecuencia es bastante más inestable.
El anillo lento es casi el paso antes de la versión estable para todos los usuarios, si te unes al programa en este segmento, las actualizaciones son menos frecuentes y te llegan cuando han pasado por bastantes pruebas con el grupo del anillo rápido. Es, en teoría, más estable.
Microsoft planea empezar a liberar versiones preliminares en el anillo lento con mayor frecuencia y "con mayor fiabilidad". Explican que actualmente les toma demasiado tiempo llevar la versiones del anillo rápido al lento y muchas veces las _builds_ que crean para arreglar bugs crean nuevos bugs.
Versiones preliminares "más estables"
La idea es intentar lograr que cada versión sea lo suficientemente estable como para usarla a diario sin que el usuario pierda productividad. Por eso las _builds_ del anillo lento ahora recibirán actualizaciones al mismo estilo de las versiones estables.
En lugar de lanzar una _build_ nueva completa para corregir bugs, van a crear parches y a enviarlos como actualizaciones de calidad. Es decir, pueden estabilizar en el anillo rápido en las versiones iniciales del desarrollo y mandar esas mejoras de inmediato al anillo lento, siempre que cumplan los estándares de calidad.
Todo esto, al menos en teoría suena muy bien, y empezará a pasar con Redstone 6, la próxima (próxima) actualización mayor de Windows 10, la que viene detrás de la de octubre (1809). Esa versión 1809 de Windows 10 ha tenido que regresar a ser probada dentro del Programa Insider hasta que se aseguren de que esté libre de fallos.
Sin embargo, con lo frecuentes que suelen ser estos problemas post-lanzamiento, muchos se cuestionan la verdadera utilidad del programa de beta testers, especialmente porque cosas como ese bug de los archivos eliminados se había reportado varias veces meses antes, y nunca se detectó. Si algo es cierto es que el Programa Insider necesita mejorar, las actualizaciones de Windows 10 necesitan pasar por mayor control de calidad antes de ser lanzadas, de eso no hay duda.
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